MAMÁ, QUIERO SER REPU

Bueno, como decía alguien, ya vuelvo a las andadas, después de un pequeño parón. En fin, vuelvo a la carga.

Esta vez, va de republicanos. No de los antiguos (Azaña and company), sino de los “modernos” (Anguita, Cayo Lara y otros elementos). Es que ahora lo moderno es ser republicano, sobre todo en un país donde las experiencias republicanas (I y II) han acabado en tragedia (en una guerra civil nada menos), cuando la única diferencia entre monarquía parlamentaria y república es cómo se organiza la Jefatura del Estado, nada más. No se es más demócrata por ser republicano, es más, al contrario, casi todas las repúblicas antiguas acabaron mal (ver por ejemplo la de Roma, con tres guerras civiles incluidas), y muchas modernas (república popular de China, República de Cuba, República Socialista Soviética…) no se destacan por lo democrático de su sistema.

En fin, basta de cuestiones filosófico-políticas y pasemos al tema de la “fotito”. Pues bien, el personaje que aparece en la foto se llama José Manuel García (IU, como no), jefe de la Delegación de Juventud y Deportes del ayuntamiento de Sevilla, acostumbra a aprovechar todo tipo de eventos para incluir en la cartelera publicitaria los colores de la bandera republicana. Eso sí, con dinero público (que no del suyo, como buen comunista que es, lo mío es mío, lo de los demás es de todos, incluida la causa republicana), que todos los españolitos (y sobre todo los sevillanos) pagamos al Estado y sus entes para el bien común. Se preguntará el lector si la causa republicana es un bien común al Estado español, para poder justificar este gasto público en publicidad. Ahora, tras 78 años de la proclamación de la II República Española por el abandono cobarde del poder por parte de Alfonso XIII (sí, sí, cobarde, fue un rey cobarde, lo que a la postre costó al pueblo español una cruenta guerra civil), todavía siguen tratando de convencer a la población de que una república es lo mejor para este país (sobre todo tras sus maravillosas experiencias). Bueno, por lo menos este “señor” no insulta como otros e imputa delitos al Jefe del Estado sin prueba alguna (lo que constituye sin lugar a dudas a una calumnia).
Lo malo es que todo esto se hace con dinero público, dinero que debe destinarse a gestionar la administración y los servicios públicos, y no a hacer propaganda “subversiva” sobre el sistema político.

Como decían los ingleses, “Spain is different”. Y qué razón tienen. Aunque yo añadiría: “With public Money, Spain is different”. Todo se puede hacer si se hace con dinero público, incluso financiar el terrorismo, como se ha visto en las vascongadas (Lo que hoy se conoce como “País Vasco”). Estoy seguro que si este tipo de campañas (y otras actuaciones) lo pagaran los políticos con su sueldo y su patrimonio, je, otro gallo cantaría. Si es que ya lo decía Quevedo, “poderoso caballero es Don dinero”, pero está muy claro que si hay que gastar, con dinero público mejor, que no están los tiempos para despilfarro.

Espero que estas cosas no se repitan, o al menos no demasiado, porque creo que, como ciudadano español que paga sus impuestos, el dinero público no debe ni puede destinarse a este tipo de cosas (que a la mayoría de los ciudadanos no nos interesa). En caso contrario, se incita a una rebelión fiscal.

JIV