jueves, 24 de septiembre de 2009

LAS COMPARACIONES SON A VECES ODIOSAS (I)











En la siguiente tabla obtenida del INE y del Eurostat podemos ver el desempleo al inicio y al final de cada ciclo de gobierno.
Como se puede observar, el gobierno de Adolfo Suárez no fue muy bueno desde el punto de vista de la política de empleo. Tampoco fue mejor el de Leopoldo Calvo Sotelo, pues en un año, hizo casi la mitad que su predecesor. Pero, esto tiene un "atenuante" la crisis de los 70 que llegó con retraso, golpeó con dureza a un gobierno en plena transición política.
Sin embargo, según se desprende del cuadro, el gobierno de Felipe González, en términos relativos, ha sido menos malo de lo que comúnmente se presume. Pues, en efecto, sólo aumentó la tasa un 4,5% y en 16 años (frente al 8,7 de Suárez). Los últimos coletazos de la crisis de los 70, al menos hasta la década de los 80.

El gobierno de José María Aznar, en 8 años (casi la mitad que el gobierno de González) ha sido el único que ha conseguido reducir el desempleo en casi diez puntos. Algunos dicen que este empleo es temporal de baja calidad y un largo número de apelativos negativos. Pero al menos ese trabajo dará de comer a esas familias. Cosa que ningún otro gobierno puede presumir, por mucho que levante el puñito.

El gobierno de Zetaparo o Z, como prefieran ustedes, va por el camino de batir los récords, tanto desde el punto de vista absoluto como relativo. Y vuelvo a repetir, las cosas no se arreglan subiendo el gasto público y los impuestos, o levantando los puñitos delante de los sindicatos-peloteros-de-turno.

Cada cual que saque sus conclusiones. Pues en efecto, las comparaciones son odiosas.

JIV

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