REIVINDICACIÓN DE LA CARTA MAGNA

Sí, casi una semana después de la celebración del 30 aniversario de la Constitución ("la nicolasa"), es preciso reivindicarla. Lo primero que debo decir es que creo que es preciso una reforma de la misma, pero tal reforma no es urgente. Lo que sí es urgente es que se cumpla y se haga cumplir por las administraciones locales, autonómicas y estatal. En efecto, se han encontrado 12 incumplimientos:

1. Las reformas de los estatutos de autonomía están destruyendo la solidaridad. Lo que supone una agresión al artículo 2.
2. El castellano está siendo marginado en varias comunidades. Incumplimiento del artículo 3.1.
3. Varios gobiernos desprecian la Carta Magna tomando decisiones inconstitucionales. Vulneración del artículo 9.1.
4. Los ciudadanos tienen derechos diferentes en prestaciones sanitarias y educativas según donde vivan. Vulneración del artículo 14.
5. Miles de personas del País Vasco y Navarra se han visto obligadas a cambiar de residencia. Art 19. Hay datos que apuntan a que el éxodo en la democracia en estas zonas es muy superior al de la época del general Franco.
6. Los medios de comunicación públicos están al servicio de los gobiernos (Telemadrid, TVC, TVG, ETB, CanalSur, Canal9,...). Incumplimiento del artículo 20.3.
7. La educación sufre una constante pérdida de calidad e importancia. Artículo 27.3.
8. Se produce una multiplicación y derroche de administraciones superfluas. Artículo 103.1.
9. Se están creando sistemas judiciales autonómicos. Incumplimiento del artículo 117.5.
10. Son los partidos los que nombran a los órganos rectores del poder judicial. Vulnerando la independencia que propugna el artículo 117.1.
11. La Fiscalía actúa a las órdenes del Gobierno de turno. Art 124.1 (en contra, apartado 2 del citado artículo, principio de dependencia jerárquica).
12. Los nuevos estatutos pretenden privilegios económicos y sociales. Vulneración de los artículos 138.1, 139.1 y 149.1.


Todos estos son los ataques que hay que denunciar, ante el TC si nos afectara directamente a nuestros derechos y ante los poderes y administraciones públicas. Más que plantear el debate de una reforma constitucional, planteemos si realmente se está cumpliendo y respetando la Carta Magna. Pues creo que a corto plazo nos perjudica a los ciudadanos (depositarios de la soberanía). Creándose situaciones surrealistas y de fábula.


Muchos de estos problemas se solucionarían si muchas administraciones y partidos políticos tuvieran un espíritu de Estado (como envidio a los alemanes y a los norteamericanos).


JIV