Cuando los partidos principales se ponen nerviosos, se nota
que empiezan las descalificaciones.
VOX es un partido político (del que tengo ciertas simpatías) cuyos miembros más
conocidos y destacados vienen del partido popular: Ortega Lara y Abascal. Un partido
en el que otros miembros vienen de posiciones liberales: Ignacio Camuñas, ex -
ministro de la UCD (como un puñado de sociatas) y miembro del PDP, y González
Quirós miembro de UCD y del CDS… Estos datos los pueden encontrar los críticos
en google.
Los críticos señalan que es un partido de extrema derecha.
Con un par.
Decir que el estado de las autonomías es inviable (nos cuesta unos 150 mil
millones de euros al año), o creer en la defensa de España, o que los asesinos
no formen parte de la vida política española y estén en la cárcel (cuando no se
han arrepentido de sus delitos), ¿es de
extrema derecha?
Lo de las autonomías es algo que claman todos los organismos internacionales
relacionados con la cosa de los dineros: FMI, UE, etc. (Quizá fue esta una de
las razones por las que Rajoy no pidió un rescate abierto)
Lo de la unidad de España es de cajón. Somos una Nación, lo hemos sido y lo
seguiremos siendo (y lo dice la constitución).
Lo de ETA es de Justicia (Cumplimiento de sus penas, nada de amnistía).
VOX y UPyD son una opción interesante, especialmente en las
europeas, donde tienen posibilidades al ser circunscripción única. VOX debería
ser un revulsivo para el PP, a ver si cambia y se quita de encima a la gente
que lo está hundiendo (empezando por el propio Rajoy que a este paso se
convertirá en el Zapatero del PP). Solo temo que los sociólogos de guardia de
Génova lo achaquen todo al castigo por los recortes económicos y no cambie
nada.
Conozco a votantes del PP, que son amigos míos, con los que hablo, y se sienten
defraudados, engañados y traicionados en sus principios por este partido y por
este gobierno (que parece más bien una extensión del PSOE).
Aunque francamente creo que con la cantidad de chiringuitos montados para que
coman miles de lameculos del poder, esto se vaya a deshacer. Los ajustes y al
racionalidad en el gasto para el ciudadano de a pie. Para los políticos y sus
cortes de lameculos, recortes ninguno. Racionalidad cero. Y si las cosas vienen
mejor, seguirán con los despilfarros sin fin.
Y así nos va
JIV
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